MONGE EMILIANO
Los ocho relatos que tejen Arrastrar esa sombra versan sobre los otros, no sólo los de carne y hueso, sino también los que habitan en la mente. Aquellos que siempre son un reflejo distorsionado, difuso y cambiante pero que a menudo son más simpáticos, atractivos, exitosos y, sobre todo, más dichosos que aquél a quien atormentan con su presencia o con su ausencia.