NIN, ANAÏS
Escritos cuando tenía unos veinticinco años y vivía en Francia con su marido, estos dieciséis relatos sorprenden por su madurez y frescura, a la vez que muestran ya los dos elementos que luego se afianzarían en su obra: la ironía y el feminismo, al igual que sus obsesiones el deseo femenino, la sexualidad, el retrato de una masculinidad tan deslumbradora como tóxica. Poco después de escribir estos cuentos, Nin conocerá a Henry Miller, quien diría de ella: «Cuando trato de imaginar de quién es deudor tu estilo me siento frustrado, no recuerdo a nadie con el que tengas el más ligero parecido. Me recuerdas únicamente a ti misma». Melancólicos y punzantes, revelan ya a una gran autora que hizo saltar por los aires las convenciones literarias y sociales de la época.