GOMEZ RIOS, MARIANO
PRESENTACIÓN /
Lo primero que es destacable de este libro, es que su autor entiende el tarot como una herramienta que ofrece una tercera voz en la relación que se establece entre el consultante y el tarotista. De manera similar a cuando Jung habla del I Ching diciendo que me dirigí hacia él como si se tratase de una persona (Jung, 2008). Por consiguiente, no se trata de un ejercicio de simple esoteria, pues el autor considera que el mazo de cartas de tarot propone una serie de símbolos que pueden ser interpretados ya sea por el tarotista, como asimismo por la persona que consulta. Otorgando, de este modo, un matiz lúdico a la experiencia del conocer. Se crea, de esta forma, un diálogo entre dos personas que intentan comprender tanto el inconsciente personal como el colectivo, con el fin de permitirse nuevas lecturas de la realidad; conformándose el tarot, por ende, en un método de reflexión.
Dado ello, es que es posible afirmar que -tal como el autor comprende la lectura del tarot- lo que ocurre en esta relación, fortalece el proceso de individuación de quien consulta. Jung señala que dicho proceso es aquel mediante el cual la persona llega a ser él o ella misma, realiza su individualidad más íntima y única en su género; es la meta de la existencia. En el proceso de individuación el inconsciente personal y el colectivo llegan a armonizarse y enriquecerse mutuamente (Hoffman, en Vergara 2008). Y en la lectura del tarot dialogan lo consciente y lo inconsciente, lo personal y lo colectivo, generándose una conversación que integra aspectos del mundo más desconocido para la persona, la cual se ve apoyada por las imágenes y símbolos del tarot. Se refuerza el autoconocimiento a partir de un lenguaje que abre resignificaciones del vivir y nuevas interpretaciones o lecturas del momento que atraviesa quien consulta. (Extracto) / Zicri Orellana Rojas / Psicóloga
RESEÑA DE CONTRATAPA /
Desde la entrega que hace el libro LEERNOS EL TAROT. UNA MIRADA DESDE LA PSICOLOGÍA, conmueve la integración de todos los ámbitos abarcados y estudiados, en algunos momentos someramente y en otros exhaustivamente. Esto es fundamental cuando hablamos de bienestar, esta condición de «sentirnos bien, estando bien». Por otro lado, es destacable la estructura científica que se observa en esta obra, la cual es transmitida amigablemente, de fácil comprensión. Considerando los conocimientos previos que cada cual puede tener frente a la lectura del Tarot, nos moviliza a pensar en un método holístico, propio de la conformación integral de quien lo consulta, proporcionando respuestas, orientaciones y un mejor estar, en relación a la condición que nos lleva a buscar un entendimiento espiritual superior.
Indiscutiblemente se transforma, entonces, en una herramienta terapéutica; dado el beneficio que otorga versus la metodología que ocupa, constituyéndose así en un instrumento valioso y replicable en tiempos en que vivimos a gran velocidad y sujetos a constantes cambios.
Por último, es una enorme contribución la que nos proporciona el autor, que para el saber es valioso y aportativo, incluso replicable por aquellas generaciones que deseen instruir su conocimiento desde esta útil herramienta terapéutica, o hasta dejando un espacio para futuras investigaciones en este ámbito. / Daniela Merino Paredes / Psicóloga