ALCALDE, ALFONSO
Estubigia, canastera, descalza, rostro de mimbre, ojos de ceniza, frente de mármol, caminando por el molo de la caleta, comprando el ultecito, el luche, las machitas, su jurel, su cauque para revenderlo y tener para los cigarrillos y un plato de sopa. Grandes pies nudosos. Los tobillos, duros como si fueran de palo seco. La cara, de una mujer de sesenta y cinco años, arruinada por el mar, tajeada por el mar.